Godard

Pasiòn de la inteligencia como debate eterno con la lògica supuestamente inevitable del capital. Mirar, enunciar, de-nunciar-se, implacable y complejamente. Poesìa libertaria de la no resignaciòn. Poièsis-producción de la inteligencia que arde. Dulzura de la belleza como desafío a las formas apocadas del nombrarse-producirse.

Giselle, su mirada.

Callada canción
del infinito,

nocturna floración
de la obsidiana.

Y ahora, de frente a una amplia ventana...

Hmm...lugares comunes: termina el año de la cuenta occidental e, inevitablemente, se hacen (hago) recuentos y balances. ¡Qué año complejo y atribulado el 2010! Recuento sucinto: Dos obras coreográficas que me invitan a seguir componiendo danza, con mayor rigor y también con mayor alegría y responsabilidad con respecto a "mi" lugar en los procesos de montaje. Un poemario azul, alado y melancólico. La conclusión de un mal amor -me duele describirlo así, pero los hechos no dan para la felicidad, la paz, ni la esperanza en esa historia desprolijamente desechada, en la que me involucré, quizá insentamente, tanto...en fin...-. El encuentro de nuevas amistades y afectos claros, frescos, como agua de manantial. La solidaridad y bondad sabia de M., S, C y G (la muchacha cuya mirada es una dulce obsidiana y que me hace volver a creer en el terciopelo del cuidado sentimental y en la transparencia). La generosa presencia de Lulú y tantas voces y rostros amigos (incluida Beatriz, mi terapeuta -y que viva la trasferencia!-).
¿Después de mi "noche oscura"-trivial, si se la confronta con las desventuras del país y del mundo, pero ineludiblemente definitoria para mi persona- logro volver a cantar acompasadamente en el coro de quienes se esfuerzan por hacer amable y éticamente habitable la realidad compleja? Así lo espero, así me empeño.

Gracias a todas y todos. La verdad, sí morí un poco, pero como comento a quienes invito a la nueva coreografía que estoy imaginando: el dolor se hace la osamenta que te sostiene, y luego se continúa en la textura crepitante del abrazo.

¡Ufff!

Abrazos para todos y todas (Itzu, llevo tu lección en el alma y las entrañas).